EL CORDERO ENMUDECIDO Promesa N 14

EL CORDERO ENMUDECIDO

PROFECÍA PROCLAMADA: Isaías 53:7

Escuché una historia acerca de un hombre que trabajaba en un matadero de ganado. A este trasquilador nunca le molestó su trabajo hasta que un día el matadero empezó a procesar corderos. Un cordero pasó por la rampa, y él dijo: “Es mi responsabilidad cortar la garganta del cordero. Nunca lo he hecho antes. Yo miraba cómo el ganado forcejeaba y luchaba, pero el cordero sencillamente levantó su barbilla. Puse la navaja, y la sangre roja se derramó sobre mi mano. El corderito me miró y luego lamió la sangre de mi mano”. Él concluyo: “Baje el cuchillo y renuncié a mi trabajo. No podía hacerlo. No podía tomar la vida de un corderito tan manso, tan tierno.

Creo que una de las mejores Escrituras en la Biblia se encuentra en Juan 10:18 donde Jesús dijo de su vida: “Nadie me la quita, sino que Yo de Mí mismo la pongo.” Jesús no cometió pecado, ni tenía la sentencia de la muerte sobre Él. No existía razón por la cual Jesús tuviera que morir, y Él no hubiera muerto a menos que Él pusiera su vida. Cuando Jesús murió Él no murió como una víctima impotente, ni lo asesinaron contra su voluntad. Jesús no murió como un mártir, sino voluntariamente, como substituto… enmudecido.

PROFECÍA CUMPLIDA: Mateo 27:12-14

Al leer el pensamiento de hoy: Esté quieto ante Dios y agradézcale por su Cordero enmudecido. Agradézcale a Dios que Jesús no se defendió, dejándole a usted solo para que defendiera su propia culpa y vergüenza.

No hay comentarios:

Publicar un comentario