INJURIADO Y ESCARNECIDO Promesa N. 15

INJURIADO Y ESCARNECIDO

PROFECÍA PROCLAMADA: Salmo 22:6-7

Jesús agonizaba en la cruz. “Y los que pasaban le injuriaban, meneando la cabeza, y diciendo: Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo; si eres Hijo de Dios, desciendo de la cruz (…); si es el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, y creeremos en Él” (Mateo 27:39-42).

Note qué mencionaron: “Tú que derribar el templo, y en tres días lo reedificas (…)”. Ellos distorsionaron sus palabras. “Si eres Hijo de Dios (…)”. Ellos desconfiaron de su deidad. “Desciende de la cruz (…)”. Ellos disminuyeron su muerte.

Amigo, subraye esa palabra “si”. Esa es la palabra que enviará su alma al infierno.

El cinismo y l escepticismo crucificaron a Jesús. Estos escépticos o incrédulos expresaron: “Él dice ser Hijo de Dios; Él afirma ser un milagro; entonces que baje de la cruz. Que lo pruebe. Haz un milagro, haz algo, convéncenos. Queremos verlo”. Sin embargo, Jesús no realizo ningún milagro para esta muchedumbre.

Ellos no debieron haber dicho: “Si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz”. Ellos debieron ir al sepulcro y ante éste decir: “Si eres Hijo de Dios, salid”.

La Biblia dice: “Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad (…)” (Hebreo 3:12). Cinismo y escepticismo crucificaron al Señor Jesús, pero fueron esos mismos pecados por los cuales Él murió.

PROFECÍA CUMPLIDA: Mateo 27:39-44

Al leer el pensamiento de hoy: Ore por los escépticos o incrédulos que existen aún en el mundo. Ore que el amor de Jesús venza sus mentes incrédulas y que ellos no lo injurien o insulten, ni escarnezcan o ridiculicen más.