Uno contra Nueve

Hay por lo general son más onerosas (gravoso) culto que las personas agradecidas.

Nueve contra uno

Los artilleros son los de los equipos de fútbol, ​​cuando los objetivos de calificación y el más criticado cuando fallan.

En Europa, no sólo el juego y los objetivos de la Roger Guerreiro brasileño Polonia, Rafael Jacques Chipre y Nene Mónaco fueron muy apreciadas, pero también la fuerza que muestran cuando las cosas no van bien. Los tres son cristianos y agradecer sabe lo que hace Dios en sus vidas.

Reflexionando sobre el texto de hoy, diez leprosos fueron sanados por Jesús. Diez leprosos con ninguna esperanza de vida encontraron la felicidad vuelve a ser normal. Ya no excluidos, ya no es necesario gritar cuando alguien se acercó a ellos.

Ahora podían salir de los pozos oscuros y pasear entre las calles y los mercados con una nueva vida, saludable y feliz. Pero los diez, sólo uno regresó para agradecerle por ser sanado. Sólo un agradecido, contra nueve ingratos.

¿Cuál es nuestro equipo? O no agradecido? Supongo que usted lee el Salmo 103. Salmo Muchos vino directamente desde el corazón agradecido de un hijo de Dios y este es uno que expone más razones para dar gracias a Dios.

Por todos sus beneficios (v.2). 
Porque Dios perdona nuestros pecados (v.3). 
curar todas las enfermedades (v.3). 
Entregar nuestra vida (v.4). 
llenarnos de amor y ternura (ver 0.4). 
Satisface nuestros deseos con la mejor (v.5). 
nosotros (v.5 rejuvenece). 
El Señor es justo Juez (v.6). 
El Señor nos (versículo 7 enseña). 
No nos pagan como nuestra maldad (v.10).

Puede seguir la lista a finales del Salmo 103 y puede escribir su propia lista. Sí, escribiré - es bueno poner en palabras.

Anote todas las cosas que Dios le ha dado en los últimos años y gracias. También anote los nombres de las personas que han hecho cosas para usted y darles las gracias sinceramente.

Piense también en el futuro. Pase un libro al año, puede guardar y grabar todas las cosas buenas, la voluntad conseguir. Anote todo lo que Dios está haciendo en tu vida y lo que otras personas hacen por ti: tus familiares, amigos y compañeros miembros de la iglesia. Nunca olvides estas bendiciones.