“Cómo
enfrentar el fracaso”
Luis
Gabriel César Isunza
• ¿Encuentras
el fracaso tan amenazador, incluso aterrador?
• ¿Sientes
dificultad para admitir que te has equivocado o que has fracasado?
• ¿Te
sientes paralizado en ocasiones por el temor al fracaso?
• ¿Experimentas
sentimientos interiores de fracaso, a pesar de las apariencias
externas de éxito?
Si
has respondido que sí a cualquiera de las preguntas anteriores,
estás observando los síntomas de una vida que tiene dificultad para
afrontar el fracaso.
I.
_________________________________.
II.________________________________.
Encontramos
una anatomía del fracaso en la vida de Moisés. Éxodo 3 comienza
con Moisés en el exilio por su fracaso. Acababa de asesinar a un
egipcio, y, temiendo por su vida, huyó al desierto, escondiéndose
de Faraón.
Tres
reflexiones claves:
1.
Dios le dijo que le iba a enviar para que liberase a los israelitas,
a lo que Moisés respondió: ___________________________
2.
La siguiente pregunta de Moisés fue: _________________________
3.
“¡Ay, Señor!, nunca he sido hombre de fácil palabra, ni antes,
ni desde que tú hablas a tu siervo; porque soy tardo en el habla y
torpe de lengua.”
III.
_______________________________
¿Cuál
es la solución para el temor al fracaso?
IV.
El antídoto para los que fracasan.
La
única persona en este mundo que nos puede ayudar a ver el fracaso
más como una oportunidad es Dios mismo.
1
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2
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Isaías
41: 9-13: “9 Porque te tomé de los confines de la tierra, y de
tierras lejanas te llamé, y te dije: Mi siervo eres tú; te escogí,
y no te deseché. 10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes,
porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre
te sustentaré con la diestra de mi justicia. 13 Porque yo Jehová
soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No
temas, yo te ayudo”.
3
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Jesús
dijo: “Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.”
4
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La
mayoría de las personas no se dan cuenta de que pueden fracasar y no
ser unos fracasados.
5
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Conclusión:
El
fracaso puede aparecer en la vida bastante atemorizador, pero cuando
lo vemos desde la perspectiva de Dios, existen nuevos matices y
nuevas oportunidades. Todos alguna vez hemos fracasado, pero
recodemos que tenemos un Dios de nuevas oportunidades.
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